viernes, 29 de marzo de 2013

VIAJE A LA HABANA. Recuerdos


Uno de los muchos carteles que se ven en las calles y centros.

Modelo clásico americano, hoy cumpliendo como taxi.
Taxi muy extendido, éste más modesto
En el interior del Hotel Nacional, en distintas
estancias hay grandes paneles con fotos.


Gran mural en la Avenida Salvador Allende.

Tomada de una de las muchísimas glorietas
que hay diseminadas por toda la ciudad
Un centro Oficial con bandera, leyenda y glorieta de Marti

En una de las salas del hotel, esta placa recordatoria del
famoso músico cubano Compay Segundo
Los tres periódicos que se editan en La Habana.
El Che Guevara, está muy presente.
El gran cartel y su texto, habla por si solo.
Dos grandes murales, uno de calle; otro del hall de un centro
oficial de salud.
En un gran parque, esta caseta con leyenda.
Edificio de la Biblioteca Nacional. Plaza de la Revolución

Se lo encargué al dictado, a un artesano de la madera, de los
muchos que había en una Macro-Feria de Artesanos.



2 comentarios:

Artemio Echeverribar dijo...

LAS FOTOGRAFÍAS que he colocado, son una pequeña muestra de las muchísimas que hice. No son ni las mejores ni las peores, pero en su variedad, he querido mostrar (no sé si lo he logrado) la esencia de La Habana que yo vi. Por supuesto que fotografié preciosos edificios de estilo colonial español, frondosos parques, palacetes en decadencia, El Malecón, galerías de arte y sobre todas las cosas; muchas librerías. Este dato de las muchas librerías, habla por sí solo del pueblo cubano. No niego que en otro tipo de cosas muy primarias tienen grandes carencias, pero desde luego, no de cultura. Mi reflexión, según iba descubriéndolas, era que había tantas librerías como en Esspaña bares.

Clau dijo...

Son muy chulas! La verdad que tanto viajar por Asia, nosotros no hemos estado en Sudamérica.

Me da bastante miedo, la verdad. Será que nos atraen las cosas que más se alejan de nosotros… Aunque esa sea la ignorancia típica del español, no?

Creer que todo lo que viene del extranjero es inherentemente mejor.